El condado de Alameda recientemente se convirtió en el cuarto condado del Área de la Bahía en participar en un programa federal de aplicación de leyes migratorias que demanda la verificación de huellas digitales de todos aquéllos registrados en prisiones locales para determinar si son sujetos de deportación. El programa, denominado Comunidades Seguras (Secure Communities), también se adoptó recientemente en el Condado de Contra Costa.