En el cruce de la frontera de San Ysidro en San Diego, dos miembros de una familia mexico-estadounidense esperan nerviosos la entrada a los EE.UU. Dentro del auto que conducen hay una pequeña bolsa que contiene una sustancia que es ilegal importarla a los EE.UU. – tierra de México. Autoridades en la frontera decomisan la tierra y a los viajeros se les permite la entrada para que continúen su viaje de regreso a casa.
El nombre de la familia no es tan importante – su intento fallido de traer tierra de México es algo muy común. Para las familias, también es algo decepcionante ya que su misión es sepultar a sus miembros de la familia fallecidos con una parte tangible de su tierra natal. La tierra es sagrada para estas familias pero siempre ha sido un gran reto conseguirla para los sepelios en los EE.UU. En un intento que puede ser considerado como revolucionario, una capilla de velatorio en el Este de la Bahía ha superado el reto.
Después de un largo y costoso proceso, Chapel of the Chimes ha hecho posible que las familias sepulten a sus seres queridos aquí con tierra de México.
“Hemos logrado algo que muchas familias mexicanas han intentado hacer pero que no les es posible porque la tierra es confiscada en la frontera”, menciona Robin Russell de Chapel of the Chimes en Hayward. “Encontramos una manera de hacerlo en la que el Departamento de Agricultura y de Seguridad Nacional están felices – encontramos una manera legal de hacer esto”.
Con los permisos apropiados, Chapel of the Chimes recientemente importó tierra mexicana para sus funerales en sus capillas en Hayward y Oakland. La tierra fue bendecida por un sacerdote en una catedral en México y luego fue transportada hasta cruzar la frontera.
“La hemos traído de manera legal, de tal manera que las familias no tienen que preocuparse”, agrega Russell. “Sabemos que es importante para ellas”.
A pesar de que los datos no están disponibles, Russell hace mención de que lo más confiscado en la frontera de EE.UU. es la tierra. “Todos siguen intentando traer tierra de su país natal”, agrega.
Russell se refiere al hecho de que mucha gente de diversos países trata de introducir tierra de su país natal a los EE.UU. para diferentes propósitos. Es una conexión sagrada para mucha gente.
Al preguntarle si este nuevo servicio es único en EE.UU., Russell responde, “Hasta donde yo sé, nadie lo ha hecho anteriormente”.
La cantidad inicial de tierra Mexicana está contenida en cincuenta pequeños contenedores sellados. Russell explica que cada familia que compre un catastro de sepultura recibirá la tierra para que la disperse en la tumba o la coloque dentro del ataúd con el difunto.
“Tenemos la tierra aquí y también el certificado de autenticidad que será dado a las familias”, agrega.
“Nunca se ha hecho en este país”, dice Dan Katz de LA ads en Los Angeles. La agencia de Katz trabajó con Chapel of the Chimes para hacer realidad esta solución única.
“Hemos trabajado con cementerios y casas funerarias por muchos años y vemos que la gente de México decide que sus restos sean enviados a México, a su país natal”, menciona Katz. “La pregunta fue puesta en la mesa, ‘¿qué tal si les traemos su país natal aquí’?”.
Katz menciona que la parte importante es que si todos los miembros de la familia están juntos aquí pueden quedarse juntos aquí.
“[La tierra] tiene ambos componentes, el ancestral ya que es de México y el espiritual ya que fue bendecida – hace a la tierra muy sagrada”.
Chapel of the Chimes dice que traerá al conocimiento de la comunidad que algo único e importante ha sido logrado para la comunidad Hispana. Algo único, sagrado, e histórico.