Hijos de padres encarcelados reciben ayuda de los tan necesitados modelos a seguir --
Tienes doce años y tu padre está en prisión. Tu madre también está en prisión o tiene un problema de abuso de drogas o simplemente se encuentra incapacitada para cuidarte. Te sientes avergonzado, perdido, lastimado o confundido. Existe también una gran probabilidad de que repitas los errores de tu padre o tu madre y te involucres en cuestiones delictivas.
OreMi, una organización no lucrativa que presta sus servicios a los hijos de padres encarcelados al crear relaciones duraderas con miembros de la comunidad como sus mentores, trabaja para romper el ciclo de crimen y encarcelamiento. Con sede en Oakland, la organización trabaja con niños de entre cuatro y dieciocho años de edad en los condados de Alameda y Contra Costa. Los mentores ayudan a sus pupilos a desarrollar sus fortalezas y a darse cuenta de su propio potencial, aumentando su confianza en sí mismos y las oportunidades de un niño de tener éxito en la vida.“La falta de un modelo a seguir estable en su vida tiene un gran impacto en los niños y en su futuro”, señala Hannah Danto, coordinadora del programa de mentores OreMi. “Una relación de confianza con un adulto afectuoso brinda estabilidad y generalmente tiene un efecto profundo de cambio en la vida tanto del pupilo como del mentor”, agrega.
María, de 13 años de edad, opina, “Mi mentor me ayuda mucho, ella me ayuda a trabajar en mi carácter, me ayuda a tener mejores calificaciones. Algunas veces tengo problemas en la escuela pero ella está allí para ayudarme y puedo hablar con ella cuando me siento enojada o triste”.
“Ser un mentor no es siempre fácil, pero siempre trae recompensas”, menciona Scott, un mentor del programa. “Ambos hemos crecido de nuestra relación mentor-tutor”.
Danto señala que se pueden apreciar cambios positivos en los niños después de un corto periodo de tiempo con sus mentores, a pesar de que frecuentemente el impacto no se verá hasta años después. “Hemos visto a los pupilos mejorar significativamente sus calificaciones en la escuela, y también hacen cosas que nunca antes habían hecho, como ir a San Francisco o al zoológico u otras cosas típicas de la infancia que se han perdido”.
Hay suficiente demanda de los mentores de OreMi que actualmente contamos con una lista de más de cincuenta niños esperando ser asignados a un mentor, que pasará al menos una hora a la semana con su pupilo. Se necesitan más mentores voluntarios, especialmente varones hispanos. A pesar de que cerca del veinticinco por ciento de los niños que OreMi asiste son hispanos, la organización no tiene mentores hispanos varones y sólo cuenta con algunas mentoras hispanas.
Aunque todos los niños del programa han sido afectados por el encarcelamiento, las necesidades de cada niño son diferentes. Los menores necesitan un modelo a seguir de un adulto positivo, constante y confiable. Pueden necesitar ayuda con sus tareas, una oportunidad de salir de casa, nuevas oportunidades y experiencias, asistencia para desarrollar habilidades sociales o simplemente alguien que pueda escucharlos.
OreMi describe su programa como un programa de mentores transformativo que se enfoca en ver a los niños como las personas en las que son capaces de llegar a ser. El objetivo del programa de mentores transformativo es ayudar a una joven persona a cambiar sus propias actitudes, sentimientos y comportamientos negativos. Ser mentor significa evitar etiquetas estereotípicas y reconocer que cada joven tiene una grandeza innata y un potencial ilimitado, así como ayudar al joven a desarrollar su propio potencial. Los mentores de OreMi son voluntarios de la comunidad, de cualquier generación, etnia o profesión.
OreMi le da el crédito del éxito de su programa de mentores a los voluntarios dedicados que brindan su tiempo cada semana para ayudar a un niño en necesidad. De acuerdo con el grupo de investigación Public/Private Ventures, los niños que reciben los servicios de mentores de OreMi:
- tienen 46% menos probabilidades de empezar a consumir drogas ilegales
- tienen 27% menos probabilidades de empezar a consumir alcohol
- tienen 36% más confianza en su padre o guardián
tienen 52% menos probabilidades de ausentarse de la escuela y así obtener calificaciones más altas y sentirse más seguros en su desempeño escolar - tienen 86% más probabilidades de ir a la universidad
- tienen 4 veces menos embarazos en la adolescencia
- tienen 4 veces menos arrestos
- desarrollan una autoestima y confianza en sí mismos elevada
Actualmente, OreMi está buscando mentores para cubrir su lista de niños en espera. Si estás interesado en convertirte en mentor o conoces a un joven que se beneficiaría de una relación mentor/pupilo, por favor contacta a Hannah Danto al 510-834-2443 extensión 3009, o visita www.oremi.info.