“Pense que mi vida nunca sería normal. Pensaba que mi familia tenía una maldición,” dice Tammy Cortez. Su historia representa la fuerza de cuerpo y espíritu humano.

Es una historia que parece increíble para la mayoría de las personas, pero familiar para aquellas que han sido víctimas del abuso y sus circustancias.
Tammy y sus tres hermanos crecieron en una familia con abuso físico y sexual de parte de su padre. Ella empezó a escaparse de su casa a los 13 años, y a la edad de 16 huyó de manera definitiva. Ella dice, “¿Quién quiere regresar a una casa donde no hay amor?”
Los siguientes 20 años de su vida estuvieron llenos de una fuerte adicción a las drogas y detenciones en la prisión. Ella estuvó en la cárcel nueve veces y eventualmente empezó a pensar más seriamente acerca de su futuro. “Vi gente mayor en la cárcel y me di cuenta que tenía que cambiar, no podía seguir haciendo eso,” dice ella. “Estaba cansada de la vida y quería algo diferente pero no sabía que había cosas buenas afuera que podrían cambiar mi vida,” ella añade.

Hablando de su experiencia, Tammy dice que muchas personas estan tan mal porque no crecieron con orientación. Finalmente ella encontró orientación y esperanza con Victory Outreach Oakland, un hogar de recuperación (www.victoryoutreach.org). Desde 1985, Victory Outreach ha estado asistiendo a las comunidades más necesitadas de Oakland colaborando con muchos proveedores de servicios locales.

Tammy dice que desde que empezó a involucrarse con Victory Outreach en el 2003, “Ya nunca miró atrás. Encontre la victoria en mi vida,” dice ella. Tammy conoció a su esposo durante un programa de Victory Outreach. Ellos se casaron en el 2004 y tuvieron una hija. En adición Tammy tiene otra hija de 24 años que tuvó cuando era una adolescente.

Actualmente, Tammy no solo ha encontrado la fuerza de vivir libre de las drogas y proveer un hogar seguro para sus hijos, también esta ayudando a otros a encontrar su camino. Ella abre su casa a personas necesitadas y en este momento tiene a cuatro mujeres con sus respectivos hijos, viviendo en su casa. “Les damos un sistema cada día, enseñándoles a reconocer quiénes son y a aprender a perdonar,” dice ella. Reflexionando sobre si misma, ella dice, “¿Quién iba a pensar que yo podría enseñar las cosas correctas de la vida?

Hablando sobre las personas que están en las calles o en dificultades ella dice, “ Veo mi vida a través de las mujeres y hombres que estan ahí afuera.” Ella dice que puede ayudarlos porque ella ya vivió lo que ellos viven y porque alguna vez pensó que no tenía futuro. Ella dice que durante sus cuatro años en Victory Outreach ella ha visto muchos hombres y mujeres de la calle, de la prisión y de familias deshechas crecer en su interior y con la ayuda de la iglesia reconstruyen sus familias. “Hay algunos hombres y mujeres poderosos que salen de estos programas,” ella menciona.
“Victory Outreach no es una religion, solo personas que tienen una relación con Dios,” Dice Tammy. “No hay un ministro que vaya a la iglesia y solo se siente atrás, de sus diezmos y diga aleluyas, somos ministros que vamos afuera. Algunas personas dicen que no hay ayuda pero hay mucha ayuda,” ella afirma.

Como parte de sus servicios y su misión personal de ayudar a las personas, Tammy pasa mucho tiempo en las calles de Oakland ofreciendo ayuda a las personas. El próximo primero de Julio ella abrirá una casa para mujeres como una extensión de Victory Outreach. Será para personas que quieran dejar la vida de la calle, ya sea de drogas, prostitución o abuso. Apesar de que reciben donaciones de comida y ropa para las mujeres que estan en su casa, las necesidades de donaciones incrementarán después del primero de Julio. La principal necesidad es transporte y ellos estan abiertos a la donación de una vagoneta u otra solución.

Tan sorprendente como la historia de su vida es que Tammy no siente que su transformación es tan especial. “Esto le puede pasar a cualquiera, solo tienen que estar listos y tener disposición,“ afirma.

Para más información sobre Victory Outreach Oakland llama al 510-482-4656 o www.vooakland.org.