Enseñe a los niños a no ver el teléfono mientras caminan y a hacer contacto visual con los conductores al cruzar la calle.
Mantenerse seguro en Halloween no es difícil, señalan los expertos en seguridad.
Decore los disfraces y bolsas con cinta adhesiva o calcomanías reflectantes. Lo mejor es que los niños usen disfraces, pintura de cara o maquillaje de colores claros, en lugar de máscaras que puedan potencialmente impedir que vean bien, según SafeKids Worldwide.
Los disfraces deben ser de la talla adecuada para prevenir tropezones y caídas. Los niños deben llevar varitas luminosas o linternas para ayudarles a ver y a ser vistos por los conductores. No permita que los niños usen dispositivos electrónicos mientras caminan, y enséñeles a hacer contacto visual con los conductores antes de cruzar la calle frente a ellos.
Enseñe a los niños a cruzar en las esquinas, usando los semáforos y los pasos de peatones. Deben ver a la izquierda, a la derecha y de nuevo a la izquierda al cruzar, y seguir observando mientras cruzan. Deben cruzar la calle caminando, no corriendo.
Los niños deben caminar en las aceras o senderos. Si no hay aceras, deben caminar de cara al tráfico lo más a la izquierda que puedan. Deben seguir una ruta directa con la menor cantidad posible de cruces.
Enseñe a los pequeños a estar atentos a los coches que giran o dan marcha atrás, y a nunca salir disparados en la calle ni cruzar entre coches estacionados.
Los niños menores de 12 años deben tener supervisión adulta cuando salgan a pedir dulces. Los que tengan suficiente edad para salir sin supervisión adulta deben permanecer en áreas conocidas y bien iluminadas, e ir en grupos.