Pedro Jesús González Sierra es un muchacho extraordinario, a la edad de 10 años cursando el quinto grado en la Escuela Primaria Palma Ceia. Si, ¡está Hecho en Hayward!
Pedro es muy expresivo cuando habla, de una manera muy animada puede cambiar de español a inglés y nuevamente al español, sin siquiera pestañear. Como es normal para alguien de su edad, se mueve inquieto. Sin embargo, puede dar su punto de vista de una manera clara… es su contacto con la mirada.
Una señal de la madurez de Pedro fue cuando una joven rio disimuladamente refiriéndose a su mexicanidad (de Pedro). Él lo tomó con madurez. “Me sentí mal, pero después me sentí triste por ella”, me dijo, con un gesto serio. Si solo algunos de nuestros adolescentes y adultos reaccionaran de esa manera, habría menos problemas. ¿Cierto?
¿Hace voluntariado? ¡Por supuesto!, En clase ayuda a quienes lo necesitan. Está interesado en sus compañeros quienes tienen problemas con sus tareas, y recomienda que los maestros encuentren la razón. También es voluntario como árbitro en los partidos de futbol de los pequeños. Parece que se preocupa por los demás, y estoy seguro que tendrá esa cualidad en su vida adulta.
¿Su futuro? Será un profesional del futbol con el Barça de Barcelona, ya que su jugador favorito es Lionel… “Messi es fenomenal” – una excelente palabra para alguien pequeño. Ahora que estamos hablando sobre sus personajes favoritos, me dice que cuando crezca escribirá un libro sobre su ídolo César Estrada Chávez, y también menciona a Martin Luther King, otro de sus ídolos.
Pedro es fuerte y será una fuerza… Algo me hace pensar que él lo sabe. Su confianza en sí mismo es visible, sin embargo hay una gran sed de conocimiento en sus preguntas, en sus declaraciones, en su postura.
Cuenta con el apoyo de sus padres todo el tiempo, en cada vuelta. Su padre es de México y su madre es de Puerto Rico. Una combinación rica. Es el hermano mayor de cuatro.
A Pedro le encanta el futbol y juega como centro y delantero. Nuestro futuro señor González es un chiquillo impresionante. Le rindo homenaje, le doy gracias a sus padres y maestros, y estoy extremadamente honrado de presentárselos. Ayudémoslo a ser líder, quien seguramente motivará el voluntariado entre sus conocidos y comunidad, por el beneficio de nuestra ciudad.