El gobernador Brown y los legislativos Demócratas han anunciado un plan para crear más impuestos sobre vehículos y aumentar el impuesto estatal de la gasolina un 40 por ciento. Si llega a pasar, la propuesta le costaría a los Californianos $52 billones sobre el curso de una década.
Si piensas estar a salvo por manejar un carro eléctrico, piénsalo de nuevo. Esta propuesta incluye una cuota anual de $100 para vehículos de cero emisiones. Los Demócratas distinguidos reclaman que nuestras carreteras no pueden ser arregladas con el dinero que ya le estamos mandando a los Demócratas élite en el capitolio. ¿Y, por qué no?
Si los Californianos ya pagamos de más para vivir en este estado, por lo menos deberíamos tener carreteras buenas. Sin embargo, este estado es reconocido por tener unas de las peores carreteras en la nación, el Área de la Bahía siendo de las peores.
Líderes Demócratas están llamando este aumento masivo de impuestos un plan de "pago-por-uso." Ese es un nombre bastante curioso considerando lo siguiente:
• Los Californianos ya pagan entre $4.5 a $5 billones al año en impuestos de gasolina, sin incluir impuestos de venta, cuotas de peso, o registración.
• De acuerdo a la oficina del Analista Legislativo, el programa de cap-and-trade agrega 12 centavos por galón al costo de la gasolina. Eso es $2 billones adicionales al año, de los cuales la mayoría de los fondos han sido dirigidos al tren de alta velocidad. Ningún centavo se ha ido a la reparación de las carreteras.
• Los ingresos estatales han aumentado casi 50% desde el 2008, de $83 billones a $122 billones.
¿Entonces, que es lo que hemos estado pagando si no hay dinero para reparar las carreteras?
Si este plan del gobernador Brown para aumentar los impuestos de gasolina pasa, podríamos acabar pagando casi 80 centavos en impuestos estatales y federales por cada galón de gasolina –porcentaje más alto que cualquier otro estado. Sin mencionar que ya tenemos uno de los precios más altos de gasolina en la nación.
Los Demócratas han tenido casi todo el control sobre el gobierno estatal por muchos años. El no haber invertido en nuestras carreteras antes, hace a uno pensar si han dejado caer al estado intencionalmente solo para crear aumento en los impuestos.
Aun así, California ya es líder de la nación en impuestos altos y pobreza. Pero esto no les parece importar a los legisladores en el capitolio al presionar duramente para lanzar este llamado acuerdo a través de la Legislatura con un plazo auto-impuesto del 6 de abril.
El gobernador afirma que esta propuesta tendrá beneficios que también le gustarán a los conservadores, asegurando que el dinero colectado vaya directamente a beneficio de autopistas e infraestructura.
A primera vista, parece un buen plan. Pero los Californianos ya hemos ido por este camino dos veces.
En el 2002, votantes Californianos pasaron la Propuesta 42 una enmienda a la constitución para asegurar que los impuestos por las ventas de vehículos fueran usados para mejorar los sistemas de transporte. Votantes luego aprobaron la Propuesta 1A en el 2006 porque los políticos habrían encontrado maneras para usar estos fondos para otros proyectos.
Los críticos que dicen que necesitamos impuestos más altos no han estado en un estado como Arizona que tiene un impuesto de gasolina mucho más bajo, 18 centavos por galón, y condiciones climáticas extremas que destruyen las carreteras. Sin embargo, Arizona tiene carreteras mucho mejores que California.
Los presupuestos son para asegurar prioridades, y deberíamos recordarle esto a nuestros oficiales electos asiéndolos responsables por las decisiones que toman con el dinero que mandamos a Sacramento.
Llámele a su represente legislativo. Dígale que ya está pagando mucho para mejorar las carreteras. El dinero necesita ser bien utilizado.
George Runner es el Vicepresidente del Board of Equalization del Estado de California.