El Condado de Alameda ha declarado una emergencia local derivada del virus H1N1 o influenza porcina. El anuncio vino tres días después de que el gobierno federal declarara una emergencia nacional provocada por la influenza porcina.
Los funcionarios de salud del condado se apresuraron a señalar que la declaración no es una respuesta a un aumento en los reportes de infecciones o a una provisión baja de vacunas, sino que es una manera de facilitar la
obtención de financiamiento estatal y federal para detener la expansión del virus si la situación empeora.“Estas emergencias son declaradas por ciertas razones legales para liberar recursos o fondos o para expeditar ciertos procesos”, señaló el Dr. Eric Kohleriter, director médico del Bay Valley Medical en Hayward. “No necesariamente refleja el riesgo sanitario”. El anuncio de la semana pasada fue el segundo en menos de seis meses en el que el condado ha declarado una emergencia relacionada al virus H1N1. Hasta el 20 de octubre, los funcionarios de salud del condado han reportado 224 hospitalizaciones causadas por el virus así como 17 fallecimientos. A través de todo el estado, ha habido 3,500 optimizaciones relacionadas al virus H1N1 y 233 muertes confirmadas.
Al preguntarle sobre la verdadera amenaza que representa la influenza, el Dr. Kohleriter señaló, ”Se ha reportado la presencia de influenza (H1N1) en todos los estados – podríamos terminar teniendo dos estaciones de influenza – la de la influenza H1N1 y la estación de influenza regular. No hay manera de saber qué tan severo será esto”. De acuerdo con el Dr. Kohleriter, en la mayoría de las personas que contraen el virus H1N1, ésta se comporta como cualquier otra gripe; están enfermos durante una semana y después se recuperan.
A pesar de las campañas del gobierno y los consejos de los profesionales de la salud, la mayoría de los estadounidenses no están planeando ponerse una vacuna contra el virus H1N1 debido al temor sobre los riesgos de la propia vacuna. “No creo que exista un fundamento científico para decir que las vacunas son dañinas”, señala el Dr. Kohleriter. “Es una vacuna nueva pero no es un nuevo proceso; la vacuna contra la influenza es relativamente segura”. El Dr. Kohleriter sí hace notar, sin embargo, que se supone que los niños pequeños habrían de recibir vacunas libres de mercurio. Además, agrega que no todos necesitan la vacuna, sólo quiénes pertenecen a los grupos de alto riesgo. Los niños pequeños y las personas obesas se encuentran dentro de esos grupos de alto riesgo de acuerdo con los funcionarios del gobierno.
El Dr. Jeffrey Silvers, director médico del Eden Medical Center en Castro Valley y San Leandro asevera que la declaración de emergencia es muy acertada. “El virus H1N1 se encuentra en nuestra área y no se está comportando como la influenza estacional; realmente necesitamos tomar acciones inusuales para manejar esta amenaza”, asegura.
De acuerdo con el Dr. Silvers, la prueba rápida disponible es únicamente 50 por ciento confiable para identificar la presencia de influenza en el organismo; y no diferencia entre la influenza H1N1 y la gripe regular. “Es importante que las personas entiendan que si sienten que tienen influenza o se les dificulta la respiración, deberían absolutamente acudir a un médico”, agrega.
Al preguntarle sobre los riesgos de la aplicación de la vacuna, el Dr. Silvers señaló que la vacuna contra el virus H1N1 está siendo preparada exactamente de la misma manera en que se prepararon otras vacunas contra la gripe en el pasado. “Éstas (las vacunas) generalmente se comportan de la misma manera. Existe un riesgo mínimo de que produzcan problemas neurológicos”. Agregó que las personas que son alérgicas a los huevos o sus componentes no deberían aplicarse la vacuna.